El decreto 24/2005 publicado en el BOCyL del 22 de marzo de 2005 determina la creación del MUSAC para “favorecer el conocimiento y acceso del público al arte contemporáneo a la vez que se asume un papel de estímulo a la creación artística en nuestra Comunidad, potenciando las diferentes manifestaciones artísticas” y dedicándose esencialmente a “la documentación, difusión, exhibición y fomento del arte contemporáneo en Castilla y León”. El MUSAC, así, aspira a ser una herramienta fundamental en la creación de sentido colectivo en torno al arte y la cultura contemporáneos.

El Museo de Arte Contemporáneo de Castilla y León aspira a ser una herramienta fundamental para conocer críticamente el arte, la cultura y la sociedad del mundo en el que vivimos y para actuar en la formulación de nuevos modelos para producir, visibilizar y compartir el arte contemporáneo que sean un reflejo de nuevas formas de entender la sociedad en tiempos de radicales y rápidas transformaciones. El MUSAC se define como un espacio abierto a toda la ciudadanía para el pensamiento, el diálogo y la puesta en común de herramientas de análisis y propuestas de actuación en torno al arte y su relación con la sociedad, empleando la museología crítica como un paradigma a través del cual los usuarios se relacionan con el museo y con el entorno para generar una red compartida de conocimientos situados y contextuales. Cruce de culturas e identidades, el museo funciona como una plataforma que transforma, problematiza y cuestiona las condiciones estéticas, poéticas, políticas y socioeconómicas actuales.

Entendido como herramienta activa, el MUSAC crea experiencias de aprendizaje, de construcción del conocimiento, de difusión del mismo y de diálogo con las artes a partir de relaciones entre las obras y los usuarios que potencien múltiples discursos o puntos de vista y que proporcionen diversos tipos de experiencias de conocimiento tanto a nivel personal como social. Como agente activo, el MUSAC debe no sólo participar de las dinámicas comunitarias, sino también debe contribuir a construirlas y hacerlas posibles. Es por ello que debe ayudar a tejer una red de relaciones entre los diferentes actores y agentes sociales y artísticos en la comunidad, destinadas a incrementar el uso social del museo, posibilitando formas que compatibilicen autonomía, participación y corresponsabilidad.